Tras una primera entrega introductoria y reivindicativa sobre el subtitulado profesional freelance, volvemos a la carga, esta vez para hablar de las distintas tareas que se realizan dentro de esta disciplina y sobre cómo se organiza el trabajo en un equipo de subtitulado. ¡Porque todo no es tan sencillo como parece!
Preparados, listos, ¡ya!: subtítulos de cine
Como comentamos anteriormente, una de las principales quejas de los espectadores es que quieren sus subtítulos cuanto antes (y, si es posible, con una calidad aceptable).
En lo que respecta al subtitulado para cine, se procura siempre hacer coincidir el estreno de las películas en V.O.S.E. con el estreno habitual doblado al español. Por lo general, se trata de una tarea «para ayer». Cuando llega el archivo de vídeo definitivo, prácticamente está a punto de estrenarse. Esto se debe a que, además de realizarse retoques en la edición del vídeo y del sonido hasta el último momento, la distribuidora evita a toda costa que una humilde servidora puede filtrar su material al público (sobre estas neuras del sector hablaré en la siguiente entrega, sin duda).
Cuando uno cobra por realizar este trabajo, también tiene una presión temporal, por supuesto. ¿Que son dos días en lugar de tres horas, como ocurre a menudo con el fansub? Sí, pero hay una pequeña diferencia. Si en esos dos días no logro una calidad óptima, no cobro y pierdo a un cliente. Mientras que en el fansub, precisamente por ser una actividad sin ánimo de lucro, se premia una traducción brillante con el reconocimiento para su autor, en el subtitulado profesional rara vez se menciona al traductor junto a los términos «magnífico», «estupendo» o siquiera «preciso» .
¿Cómo hacemos entonces? Seguimos la regla ECC: Esperar, Correr y Cruzar (los dedos) [pendiente de patente por la autora que aquí suscribe].
Una vez que se recibe el aviso del material que vamos a subtitular (en mi caso es de asignación más o menos aleatoria; se tiene en cuenta básicamente similitud del proyecto con otros anteriores), nos ponemos manos a la obra con el visionado (si nos facilitan el vídeo en condiciones «normales de persona») y, en función del plazo del que dispongamos, traducimos, revisamos y volvemos a revisar. Y al marcar el reloj la hora determinada, hacemos clic en «Enviar» y cruzamos los dedos. Todo esto sin considerar que los imprevistos surgen cuando menos te lo esperas. Pero el cine tiene una particularidad: el plazo de entrega es completamente inamovible. Todavía no conozco ningún estreno que se haya aplazado por una gastroenteritis de un traductor.
Sobre finales alternativos, extras y tráilers
Si el proceso (muy resumido) que acabamos de revisar para cine puede resultar desconcertante y estresante, en el procedimiento que se sigue para el subtitulado completo de un DVD se deben tener en cuenta muchas más variables. ¿Creías que en este soporte cabe una peli o una serie y poco más? ¡Pues abre tu mente y tus posibilidades de trabajo de paso! ¡Bienvenidos sean los extras! ¡Los nuevos acuerdos de licencia del mundo audiovisual! ¡Siempre incluidos, pero muy ignorados!
Estás ahí, lo sé… pero paso de ti. Triste vida la del extra de un DVD… |
Haciendo un recuento rápido, tenemos la película o serie, los comentarios del director, a veces hasta los comentarios de los actores (suele ocurrir bastante en las películas de humor), las escenas inéditas, los distintos tráileres que quieran añadir e incluso fragmentos que no incluyen vídeo ni audio, pero que también se traducen: el propio menú, las fichas de los personajes, la sinopsis, etc. Como veis, aquí tenemos varios elementos de distintas áreas de especialidad: la localización de software, la traducción audiovisual y… agarraos que vienen curvas… ¡hasta la localización de videojuegos! Buscad entre los DVD de vuestros hermanos pequeños y seguro que alguno encontraréis que incluya minijuegos relacionados con la propia película. ¿A que resulta que el subtitulado de DVD requiere más habilidades de las que pensasteis en un principio? Y todo esto sin contar posibles finales alternativos que nos hacen subtitular aunque finalmente no sean los elegidos. Por nuestras manos pasa mucho contenido que a veces ni siquiera llega al gran público (pero que, como anécdota, siempre deja alucinaos a los colegas).
¿Por qué se tarda «tanto» en subtitular una película para DVD?
Básicamente, porque el proceso es muy complejo. Sé que muchos preferirán ver la serie o la película en V.O. sin subtítulos o con fansubs antes de esperar a ver la copia directamente del DVD, con sus subtítulos (supuestamente) bien ajustados y traducidos. Pero debemos tener en cuenta dos factores: (1) lógicamente, no podremos comercializar un DVD hasta que no hayan dejado de emitir la película en sala o la serie en televisión; (2) a partir de ahí, cada distribuidora decide su fecha de lanzamiento en función del presupuesto y de sus preferencias de marketing propias.
El proceso de subtitulado simplificado |
A estas restricciones se suman todos los elementos del procedimiento de subtitulado, que comienzan por la elaboración del guion en el idioma original y acaban en la grabación del propio DVD. En todo este proceso participan lingüistas especializados en varios ámbitos y procedentes de diversos países. Aquellos formados como traductores tenemos la suerte de poder encajar en prácticamente todos los cargos. A continuación se mencionaran (por orden de intervención) los distintos puestos y sus tareas asociadas en un entorno óptimo, dejando de lado aquellos relacionados con la creación física del soporte (que dan de comer a otros tantos en la industria).
- Gestor de proyectos de subtitulación: es el encargado de las comunicaciones con el cliente, del reparto de materiales y de la selección de personal para cada proyecto. Básicamente, es el que reparte el bacalao. Suele trabajar en la sede de la empresa o en una sede alternativa para el mercado europeo o asiático, por ejemplo. [Si te interesa este puesto y no sabes qué es un gestor de proyectos, te recomiendo que leas esto, pág. 21]
- Personal especializado en la transcripción de guiones para el idioma original: se encarga del visionado del vídeo y la extracción del texto del guion. Esto es imprescindible para las distribuidores, aunque dispongan ya del guion original para la traducción para doblaje, ya que todos los DVD deben incluir subtítulos en la lengua de origen, además del recientemente añadido subtitulado para sordos.
- Ajustador: realiza el ajuste para sincronizar el subtítulo con la voz original. Para ello, se vale de un programa de ajuste o spotting. Es la parte más técnica y menos lingüística del proceso, pero igualmente imprescindible para poder medir con precisión el espacio para el traductor.
- Traductor: es el que menos presentación requiere. Traduce desde el audio original / vídeo original / guion en el idioma de origen / subtítulos en el idioma de origen (aunque seguramente en breve saquen cualquier otra modalidad para dificultar aún más nuestro trabajo).
- Revisor lingüístico: trabaja con la traducción del traductor y se le permiten realizar cambios y sugerencias, sin que sean definitivos hasta su revisión por parte del traductor original.
- Revisor técnico con visionado: se encarga de una revisión centrada más en la parte técnica (ajuste de subtítulos a la voz original, por ejemplo), una vez realizados los cambios lingüísticos.
A estos puestos añadiría un especimen muy común en el panorama audiovisual actual:
- Chico/a para todo (también llamado multitarea): hace prácticamente todo lo anterior, además de la creación de glosarios, fichas para garantizar la consistencia, revisión de manuales de estilo, caza de gazapos en el guion original o en el ajuste, y un largo etcétera. En el mundo ideal también le pagan por cada tarea que realiza.
[Por si os lo estáis preguntando, mi puesto se parece mucho a este último, pero vivo en el mundo ideal en que me pagan cada tarea que realizo a su precio (justo o menos justo). Creo que si no fuera así, no estaría dispuesta a contaros todo esto. Bueno, siendo sincera, ni siquiera trabajaría en todo esto. Ya os habéis podido imaginar que el subtitulado tiene mucho de vocacional.]
Una servidora promete ampliar cada una de estas tareas con chascarrillos varios en próximas entregas en este mismo blog.
Misma hora, mismo canal.
Reflexión final off-topic: ¿Hacia dónde debería dirigirse la industria para paliar los problemas de inmediatez que afectan a su negocio?
Muchos me comentan que cómo es posible que trabaje subtitulando para DVD, que es un mercado muerto. Yo afirmo categóricamente que no lo está, puesto que sigo trabajando en él. Ahora bien, creo que quizá la industria debería pensar en utilizar el formato «nube» para cargar y permitir descargar el contenido, lo que agilizaría mucho el proceso y además permitiría ahorrar en costes físicos. Nosotros podríamos seguir realizando nuestro trabajo, subtitulando incluso con herramientas en tiempo real en la nube, y ellos no perderían (tanto) su cuota de mercado. ¿Qué pensáis vosotros?